CaixaBank ostenta desde 2012 la Presidencia de la Red Española del Pacto Mundial, lo que le ha permitido formar parte de la mayor iniciativa del mundo en desarrollo sostenible durante este periodo de tiempo. En esta etapa, la REPM ha conseguido ser el interlocutor directo con Naciones y referente para el sector privado en España a la hora de alinear sus estrategias y operaciones con los Diez Principios universales además de promover los Objetivos de Desarrollo de las Naciones Unidas. Su papel activo ha favorecido la formalización de alianzas público-privadas, generar valor compartido para su entorno, así como establecer un diálogo entre las empresas para compartir las mejores prácticas. Durante este tiempo ha acompañado a las empresas en su propia evolución en materia de RSC y mantenerlas en la vanguardia de la sostenibilidad empresarial.
CaixaBank ha conseguido integrar los Objetivos de Desarrollo sostenible en su Plan Estratégico y en su plan director de Banca Socialmente Responsable. De este modo ha logrado el reto de tangibilizar los intangibles, es decir, aterrizar las propuestas empresariales de manera que sean factibles. En este sentido, el banco no espera gestos sino respuestas, habla de soluciones que van más allá de su actividad bancaria, o, lo que es lo mismo, actuaciones responsables que ofrezcan un camino de futuro para las personas y el mundo que vivimos.
Para la próxima década de la acción, la entidad se ha fijado el reto de contribuir al máximo a través de su propia actividad. Lo acaba de hacer con una reciente emisión de un bono social en apoyo a los ODS e insiste cada día a través del impulso a proyectos de Acción Social y del establecimiento de alianzas estratégicas en materia de sostenibilidad.
