Endesa siempre ha sido muy consciente de que los problemas y los retos que existen en los entornos en los que opera son, también, sus problemas y sus retos. Por eso, aportar soluciones en estos escenarios es, en realidad, una manera de seguir creciendo junto con las sociedades en las que estamos presentes.
Partiendo de esa base, la compañía ha buscado colaborar con entidades de la sociedad civil que le pudieran ayudar en esta tarea. No se trata de delegar en un tercero los problemas. El razonamiento que existe detrás de esta manera de actuar tiene que ver con una idea, con un concepto: la visión enriquecedora de un compañero de viaje permite que las soluciones sean más eficaces.
Desde esa perspectiva, y centrándonos en el aspecto de responsabilidad social, Endesa busca la colaboración con entidades de la solvencia, profesionalidad y capacidad de Cruz Roja, para poder desarrollar sus proyectos.
Sin duda, Cruz Roja es, entre las organizaciones sociales, una de las más consolidadas y con más prestigio, basado en una larga historia de compromiso con la sociedad y en su enorme capacidad de llegada a las personas más necesitadas. Con más de 150 años de historia, un trabajo continuo de apoyo en materias tan relevantes como inclusión social, empleo, salud, educación o medioambiente, la labor de Cruz Roja ante situaciones críticas constituye una esperanza para millones de personas azotadas por fenómenos climáticos extremos o crisis sociopolíticas.
El último ejemplo de esto lo estamos viendo en su actuación durante la crisis del COVID19. Más acostumbrados a ver su labor a miles de kilómetros de aquí, Cruz Roja ha llegado a realizar 600.000 intervenciones en un mes en España. Pero este no es un ejemplo aislado de su labor en nuestro país, donde su actividad beneficia a más de 10 millones de personas. Tener este alcance sólo es posible a través de una capilaridad excepcional, con más de 200.000 voluntarios.
Este currículo la convierte, obviamente, en un socio ideal para cualquier acción social, por capacidad de llegada y gestión. Por ello, desde Endesa siempre hemos confiado en Cruz Roja y desarrollamos iniciativas como “Desayunos y meriendas con corazón”, dirigidas a niños y niñas de familias en riesgos de exclusión.
Me gustaría, sin embargo, destacar un programa en especial en el que participamos juntos. Se trata de un programa de voluntariado energético dirigido a familias que se encuentran en situación de pobreza energética, y en el que también participa ECODES, y cuyo objetivo es el de la optimización de la factura eléctrica y formación en eficiencia energética. En este programa, que se inició en 2015, participaron el año pasado180 voluntarios de Endesa y 126 de Cruz Roja, y se beneficiaron cerca de 2.500 familias.
Por toda esta historia común anterior, la propuesta de colaboración entre Endesa y Cruz Roja ante la crisis del COVID19 surgió de forma casi inmediata. Endesa presentó un plan de Responsabilidad Pública dotado con un fondo de 25 millones de euros para hacer frente a esta pandemia a través de tres ejes de actuación: compra y donación de material sanitario, condiciones especiales de suministro energético en hospitales de campaña y hoteles medicalizados y, por último, donación económica a entidades y ONGs para cubrir necesidades específicas detectadas. En este último eje hemos abierto la iniciativa de colaboración con Cruz Roja, con una aportación de 500.000 euros para su programa Responde, dirigido a familias vulnerables que están siendo especialmente golpeadas por esta pandemia. La iniciativa está abierta a los empleados de la compañía que voluntariamente se quieran sumar a través de micro donaciones.
Por todo lo anterior y desde la cercanía de nuestra estrecha colaboración, nos alegra felicitar a Cruz Roja por su 157º cumpleaños y confiamos en que seguiremos celebrando juntos muchos futuros aniversarios.
