La creatividad, la innovación y el diseño son herramientas que nos permiten atraer la atención de ciudadanos y pacientes sobre campañas de prevención y cuidado de la salud y el bienestar. Es la contribución del grupo sanitario Ribera al marketing social, que se define como “el uso de técnicas de mercadotecnia para difundir ideas que beneficien a la sociedad y eviten actitudes que se consideran perjudiciales”.
La conmemoración del Día de la Creatividad y la Innovación me da la oportunidad de vincular estos dos conceptos, creatividad y marketing social, entendidos ambos en un sentido amplio, como me gustaría desarrollar a continuación.
Nuestra iniciativa más reciente en este sentido ha sido la realizada en el contexto del Día Mundial de la Salud, en colaboración con el conocido ilustrador vasco 72 kilos. Pero hemos optado por estos recursos en campañas anteriores como la de Ritmos de Vida, para la prevención de riesgos cardiovasculares, o para la campaña “en blanco” para concienciar sobre el silencio que rodea al suicidio, ambas realizadas en colaboración con la agencia Maart y por las que hemos conseguido varios premios y reconocimientos.
La colaboración con Óscar Alonso, el ilustrador conocido como 72 kilos, que cuenta con más de 2,4 millones de seguidores solo en Instagram, nos ha permitido dar forma y color a los valores de nuestro modelo de salud responsable, entre los que destacamos la profesionalidad, la humanización, la prevención y la tecnología en la atención a nuestros pacientes.
Las características viñetas y mensajes de 72 kilos reflejan a la perfección los pilares de nuestro modelo de asistencia sanitaria y, sin duda, confirman nuestra apuesta por la creatividad, aplicada a una disciplina artística como es el dibujo y la ilustración. Y nos permite llegar a un público más amplio, con un lenguaje más cercano y acorde a los nuevos tiempos. Porque también en salud, como en cualquier otro sector, hemos de acercarnos al consumidor, en este caso el paciente, a través de los canales que él utiliza para conversar en cualquier otra actividad de su rutina diaria.
En este sentido, en sanidad, se vive muchas veces de espaldas a la creatividad, olvidando que, también para hablar de salud, es importante que lo hagamos de un modo diferenciador e innovador para que nuestros mensajes calen más y mejor en la audiencia a la que nos dirigimos. El fin que se persigue, merece que hagamos ese esfuerzo.
En el caso de la campaña sobre el cuidado de la salud y bienestar, diseñada junto a 72 kilos, hemos puesto en valor la importancia de la prevención, el autocuidado, la tecnología, la humanidad y el trato amable y personalizado, así como la elección de profesionales acreditados con mensajes como “tu salud es una gran responsabilidad”, “cuida tu salud en todas las etapas de la vida”, “busca el mejor camino para prevenir enfermedades”, “para cuidar de tu salud rodéate de buenas manos y la mejor tecnología”, “déjate acompañar con cariño y humanidad” o “te cuido y me cuidas”.
Hemos dado difusión a estos dibujos y mensajes en nuestras redes sociales, web y canales internos de comunicación. Y en los próximos meses serán los protagonistas de diferentes acciones en nuestros centros sanitarios.
Nuestras campañas ponen el foco en valores que considero imprescindibles para garantizar el mejor cuidado de la salud y bienestar de nuestros pacientes.
Mejorar su experiencia en los hospitales, avanzar en nuestro programa de humanización y hacerles partícipes del cuidado de su salud para ayudarles a prevenir enfermedades son el objetivo de gran parte de las acciones que llevamos a cabo en nuestros centros, que, sin duda, requieren de una gran dosis de creatividad y suponen, en ocasiones, innovar en la promoción de la salud y que aterrizan el concepto de marketing social, como el programa Ritmos de Vida, de música y salud, con microconciertos, musicoterapia y un canal de música propio; Ribera Camina, que incluye desde el Camino de Cervantes, con rutas saludables y charlas de salud a lo largo del Corredor de Henares, hasta las caminatas saludables en Vinalopó; actividades como la gymkana del Hospital del Vinalopó para fomentar la movilidad en pacientes en diálisis; y las escuelas de pacientes, para la educación en salud de nuestros pacientes y sus familias.
Otras acciones, como el programa de danza terapéutica del Hospital Universitario de Torrejón para pacientes con Parkinson o las sesiones de magia terapéutica en este mismo hospital, demuestran que siempre se puede innovar y hacer atractiva una visita a un centro sanitario, y, además, obtener resultados beneficiosos para la recuperación del paciente.
Y gran parte del mérito la tiene la creatividad e innovación para alcanzar más y mejor a nuestro público objetivo: los pacientes del grupo Ribera, con un gran propósito: mejorar la calidad de vida, la salud y el bienestar de la población, y contribuir a hacer más sostenible el sistema sanitario ante los grandes retos de accesibilidad que tiene por delante.
Esta tribuna forma parte del Dosier: Día Mundial de la Creatividad y la Innovación Sostenible.