Si, a estas alturas, hay una cuestión en la que existe consenso colectivo, esta es la gravedad de la sequía en la que estamos inmersos y la necesidad de tomar medidas que la erradiquen o, por lo menos, que palien sus efectos.
Solo en España, el 74% del territorio se encuentra en riesgo de desertificación. En 2021 el Gobierno presentó el informe “España 2050”, en el que se reconoce la preocupación por el estrés hídrico, con el propósito de poner en firme esta problemática y las directrices que contribuyan a mejorar la situación. Pero, imperativamente, las empresas debemos preguntarnos: ¿qué podemos hacer para remar en la misma dirección? La respuesta es sencilla y compleja a la vez: ser lo más eficientes posible por lo que respecta al uso del agua a lo largo de nuestros procesos productivos.
Este es, precisamente, el objetivo que persigue el Plan de Eficiencia Hídrica de Roca Group, en marcha desde 2018. El proyecto forma parte del segundo vector de transformación sostenible del grupo, bajo el paraguas de “materiales sostenibles y circularidad”, activado junto a otros siete ejes de acción: descarbonización, productos sostenibles, people & development, compromiso social, sustainable supply chain, logística sostenible, y promoción y responsabilidad comunicativa de la práctica sostenible; todos enmarcados en el Sustainability Roadmap de Roca Group, aprobado hace cuatro años.
A través de un piloto de eficiencia hídrica, ubicado en cuatro zonas especialmente áridas, Burgos (España), Cantanhede (Portugal), Settat (Marruecos) y Eskisehir (Turquía), pusimos en práctica una estrategia circular de la gestión del agua, basada tanto en minimizar su uso, evitando fuentes de agua fresca siempre que no fuera estrictamente necesario, como en potenciar la reutilización y el reciclaje de los recursos hídricos.
Se llevaron a cabo auditorías en estos países y, en base a las respuestas de la evaluación, se creó una estrategia para instalar medidores de flujo; no solo analizando el agua de entrada y salida, sino también su uso durante todo el proceso. De este modo, la evaluación del gasto de agua en cada una de las fases productivas permitió implementar varias mejoras en las factorías.
Ahora, tras el éxito de esta primera etapa, está ya en marcha la implementación progresiva de estas medidas en las 79 fábricas de Roca Group por todo el mundo. El tiempo apremia, y queremos llegar a 2030 con las mejores notas.
Otro compromiso imprescindible que debemos tomar las empresas en nuestra acción en favor del agua es el de la medición rigurosa.
Esta nos permite, no solo tener un termómetro de cumplimiento, sino también animar a toda la organización y tener presente que podemos alcanzar nuestros objetivos. Los esfuerzos realizados por reducir la intensidad de uso de agua en nuestras operaciones -que se calcula dividiendo el consumo total de agua fresca entre el importe de ventas netas- se han traducido en un descenso del 30% entre 2022 y 2021, con una reducción acumulada del 55% respecto a 2018. Además, el consumo total de agua en 2022 fue de 2,2 millones de metros cúbicos, con un descenso del 28% respecto al año anterior y un 47% menor que en 2018. En estos momentos se están terminando de calcular los datos del último año.
En paralelo, este plan más industrial se combina con otro enfoque más de consumo, enfocado en nuestros productos, teniendo en cuenta que la mayor parte del consumo de agua doméstico pasa por nuestros productos. Por ejemplo, los mecanismos de descarga de los inodoros, cuyos depósitos se han reducido considerablemente: si antes tenían un volumen de 15 litros ahora tienen opciones de descarga eficientes con 2 o 4,5 litros.
Nuestra preocupación por el agua no es nueva, ni está asociada al alarmante estado de sequía actual: lo demuestra el impulso en 2010 de la Fundación We Are Water. Esta organización tiene como objetivo sensibilizar sobre la necesidad de crear una nueva cultura del agua, que permita una gestión sostenible de los recursos hídricos en todo el mundo, así como realizar acciones destinadas a paliar los efectos negativos de la escasez de agua. Hasta el momento, la entidad ha desarrollado 96 proyectos en 38 países ayudando a más de 3,7 millones personas.
No obstante, desde Roca Group tenemos claro que ninguna de las acciones debe disociarse o llevarse a cabo independientemente a la hoja de ruta de sostenibilidad. Nos hemos marcado 2045 como fecha límite para prescindir de los combustibles fósiles, y otros retos como: mejorar nuestra eficiencia energética, reducir la generación de residuos o eliminar los plásticos de un solo uso en embalaje, entre otros. Somos conscientes de que nuestra responsabilidad social es mayúscula respecto al agua, así que desde Roca Group nos encontrarán organizados, proactivos y ambiciosos. ¡Esto es solo el principio!
Esta tribuna forma parte del Dosier Corresponsables: Día Mundial del Agua 2024.