Cada mes de marzo conmemoramos la lucha de las mujeres por formar parte activa e igualitaria de nuestra sociedad. No es solo una cuestión de derechos, sino también una demanda justa de visibilidad porque, desgraciadamente, en el 2022 la desigualdad de género sigue estando presente en todos los indicadores del desarrollo sostenible.
Aunque seguimos avanzando, en nuestro país todavía existen desigualdades injustificables en materia de empleo. No solo por las dificultades a las que se enfrentan muchas mujeres en el acceso al mercado laboral, con mayor tasa de desempleabilidad y problemas para conciliar (según el estudio “Las invisibles” de la Asociación Yo No Renuncio, el 75% de las trabajadoras en activo cambió su trayectoria laboral al convertirse en madre), sino porque en ocasiones existe una brecha salarial que continúa haciendo patente que nuestro sexo gana menos dinero que el opuesto realizando el mismo trabajo.
En Weber Shandwick nos hemos comprometido a trabajar por hacer un mudo más inclusivo para todos. Y promover la igualdad de género forma parte de este compromiso. Las personas que forman Weber Shandwick son su mejor activo y no podemos hablar de buenas prácticas sin pensar en su bienestar (como hemos hecho desde el inicio de la pandemia para garantizar que la continuidad del negocio no se conseguía a costa de la salud y la conciliación de nuestros empleados). No es un discurso vacío, sino una forma de liderar que se materializa en acciones tangibles.
En España, nuestro Comité de Dirección está integrado principalmente por mujeres y dos somos las co-directoras generales que dirigen todas las operaciones de la agencia en nuestro país. En términos salariales, podemos asegurar que no existe diferencia en términos económicos entre nuestros trabajadores y trabajadoras por razón de sexo; y además entendemos que la igualdad va más allá de la nómina a final de mes. Por eso, animamos a todas las mujeres con las que tenemos la suerte de contar en nuestras filas a ser visibles, organizando sesiones donde puedan servir de inspiración al resto de la compañía compartiendo sus logros y saber hacer.
Nuestro objetivo no es servir de referencia, sino saber que lo que demandamos a la sociedad lo ponemos primero en marcha en casa. Solo así, con la participación de todos y el ejemplo empresarial, podremos dejar de hablar algún día de la desigualdad de género en el empleo.
Este artículo forma parte del Dosier Corresponsables: Día Mundial de la Mujer 2022.
