En el Perú abunda el gas natural, recurso energético clave para la transición energética, extraído desde Camisea, en Cusco, el gas natural para su uso vehicular o GNV, se ha convertido en un aliado de los transportistas y del medio ambiente, siendo conocido como un combustible ‘eco amigable’.
Los especialistas mencionan que esta energía es mucho más limpia porque además de generar menos emisiones de CO2 por cada kilómetro recorrido, genera mínimas cantidades de azufre, mercurio y otras partículas, lo que la convierte en una energía que ayuda a disminuir el calentamiento global, reducir el efecto invernadero y mejorar la calidad del aire.
Llevar esta energía a más peruanos es muy importante, es por eso que empresas como PRIMAX vienen dando grandes pasos para la masificación del gas natural vehicular a través de la implementación de gasocentros en el país. Actualmente, la marca se viene consolidando como la red más amplia de GNV en el país al contar con 66 estaciones ubicadas en Lima, Cusco, Nazca, Piura, Lambayeque y Huarmey-Áncash.
Al respecto, Yuri Proaño, Country Manager de PRIMAX en Perú, sostiene, “Nos sentimos muy orgullosos de llevar energía más limpia a más peruanos. Con ello estamos dinamizando el uso de un combustible más eficiente y amigable con el medio ambiente. Nuestro compromiso es ser una empresa líder que transforma el mercado peruano y hace la vida más fácil a nuestros clientes”.
La implementación de un gasocentro requiere de la construcción de almacenes en tanques criogénicos para almacenar el GNL, el cual es vaporizado a través de un equipo instalado en la misma estación para convertirlo en gas natural seco (GNV). Su distribución se logra a través de una red de ductos internos que llegan al surtidor de carga y queda listo para el despacho y abastecimiento a vehículos menores.