La Eficiencia Energética en Edificios es una Prioridad, ya que la mayor parte del consumo energético se produce en espacios interiores. Según la ONU, las ciudades representan el 78% del consumo energético global, y en el ámbito local, el sector residencial peruano figura como uno de los mayores consumidores de electricidad.
Según McKinsey & Company, la demanda de energía ha experimentado un incremento del 14% entre 2011 y 2021. Este aumento en el consumo de energía se debe al crecimiento de la población mundial y la expansión constante de las economías emergentes.
Con motivo del Día Mundial del Ahorro de Energía (21 de octubre), la eficiencia energética emerge como una herramienta esencial para disminuir la cantidad de energía requerida para ofrecer una amplia gama de servicios, de manera sostenible.
En este contexto, el facility management (FM) está desempeñando un papel creciente en el diseño de espacios en edificios comerciales y corporativos, incorporando opciones tecnológicas que abarcan materiales, métodos y técnicas. Estos enfoques, a mediano y largo plazo, tienen un impacto positivo en la eficiencia energética de sistemas de bombeo, iluminación y climatización.
En este sentido, Juan Carlos Cornejo, Gerente de Producto Mantenimiento y Servicios Auxiliares del Grupo EULEN Perú, enfatiza que el facility manager desempeña un papel fundamental en asegurar la comodidad, seguridad y operatividad del entorno. En este contexto, el especialista ofrece tres recomendaciones clave para potenciar la eficiencia energética de los sistemas en los edificios.
1. Gestionar los equipos que utilizan energía
Esto se logra mediante el control rutinario de los equipos. El mantenimiento preventivo regular y planificado de los equipos que utilizan energía puede ayudar a identificar fugas, reparaciones o reemplazos.
2. Utilizar eficientemente los controles de iluminación y HVAC
El profesional de FM puede reducir el desperdicio de energía mediante el uso eficaz de soluciones de control, con la finalidad de mejorar la eficiencia de los sistemas de iluminación y HVAC. Sea halógeno, fluorescente o led; si la iluminación permanece encendida en áreas iluminadas por luz natural o espacios desocupados, se desperdicia energía, y claramente también si tenemos el aire acondicionado encendido en áreas vacías.
Por ejemplo: uno de los tipos más comunes de controles de iluminación son los sensores de ocupación, que encienden la iluminación automáticamente cuando detectan presencia y la apagan cuando el área está vacía. También, se pueden utilizar en iluminación exterior: los postes externos.
3. Gestionar los equipos que utilizan energía
En edificaciones antiguas, existen muchas oportunidades para modernizar los sistemas mediante el uso de opciones “retrofit”. Por ejemplo: instalar lámparas tipo led en luminarias que cuenta con tecnología fluorescente, o halógena.
Otros ejemplos. Proyectos de modernización de sistemas de bombeo a presión variable, cambiar puertas y ventanas aisladas térmicamente o la instalación de aislamiento mejorado en las canalizaciones de aire acondicionado.
Al mejorar el rendimiento de la envolvente en los edificios, las empresas pueden reducir sus necesidades de calefacción y refrigeración, desperdiciando menos energía y siendo más eficientes al mismo tiempo.
La promoción de la sostenibilidad y la eficiencia energética se ha convertido en un imperativo en diversos ámbitos, desde nuestros hogares hasta los proyectos urbanos. Estas prácticas no solo benefician al medio ambiente, sino que también repercuten positivamente en la calidad de vida de las personas y en la gestión eficaz de los recursos.
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