La Organización Internacional del Trabajo (OIT) enfatiza que “es esencial intensificar los progresos en materia de diversidad e inclusión para crear lugares de trabajo productivos y resilientes”. Sin embargo, advierte que se está haciendo muy poco para promover la inclusión laboral de grupos minoritarios, que se traduce en la pérdida de beneficios potenciales para las empresas y sociedad.
En Latinoamérica, donde los países tienen altas tasas de informalidad laboral e inequidades sociales, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) subraya la importancia de incluir a los grupos vulnerables, al trabajo formal en las empresas.
“Para la Cepal, la inclusión laboral es un objetivo del desarrollo social inclusivo que busca que todos los integrantes de la fuerza laboral puedan acceder a trabajos decentes que aseguren niveles adecuados de remuneración y cobertura en protección social”, señala, José Manuel Salazar-Xirinachs, Secretario Ejecutivo de este organismo internacional.
La inclusión laboral de población vulnerable como las personas con discapacidad, mujeres, grupos étnicos minoritarios, entre otros, contribuye al crecimiento de las empresas. Por ejemplo, las compañías que poseen equipos de liderazgo con características de diversidad en su composición tienen un 33 % más de probabilidades de superar en rentabilidad a sus pares de la industria, señala Mackinsey Global Institute.
Además, la inclusión laboral no solo trae una mayor rentabilidad, sino que también contribuye a un mundo más justo al cumplir el ODS 8 referido al ‘Trabajo decente y crecimiento económico’ y el ODS 10 sobre ‘Reducción de las desigualdades’. Por donde se le mire, la inclusión laboral siempre reditúa beneficios económicos a la empresa y sociales al país en que opera la compañía con estas prácticas.
En Perú, la iniciativa ‘Empresas Integradoras’, un trabajo conjunto de gremios empresariales, sociedad civil, agencias de las Naciones Unidas y el sector público, en la que Corresponsables es un medio aliado, se enfoca en promover la inclusión laboral en la micro, pequeña, mediana y gran empresa.
Precisamente este año, se reconocieron las buenas prácticas de 15 compañías de diferentes dimensiones (incluyendo micro empresas y pymes) cuyas experiencias en inclusión laboral son ejemplos para otras empresas que quieren contribuir al desarrollo social elevando su productividad y beneficios que presentamos en este dosier. Por ello, invitamos a más organizaciones privadas a unirse en este camino por un mundo más sostenible, justo, con paz y progreso para todos.
Este artículo forma parte del Dosier de Empresas Integradoras.