En marzo del año en curso, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y la Alianza Mundial para los Edificios y la Construcción (Global Alliance for Buildings and Construction, GlobalABC) presentaron el Informe sobre el Estado Mundial de los Edificios y la Construcción. El documento señala que la demanda de energía y las emisiones de los sectores inmobiliario y construcción representan más de una quinta parte de las emisiones mundiales.
Asimismo, de acuerdo a las Naciones Unidas, las urbes son responsables del 70% de las emisiones de carbono a nivel mundial aproximadamente, de más del 60% del consumo de recursos, y albergan a casi el 60% de la población mundial. Esta tendencia al alza hace evidente que el logro del Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 11 —que busca que las ciudades sean más inclusivas, seguras, resilientes y sostenibles— se presente como una meta crucial para la construcción de un futuro viable.
La industria de la construcción inmobiliaria desempeña un papel fundamental en la transformación urbana que necesitamos. Tradicionalmente, la construcción ha sido un sector con una alta huella ambiental, caracterizado por un consumo intensivo de energía, materiales y generación de residuos. Sin embargo, la innovación y las prácticas sostenibles están redefiniendo el panorama, presentando oportunidades inéditas para mitigar el impacto ambiental y fomentar ciudades más habitables.
La implementación de tecnologías ecoamigables es uno de los pilares esenciales para alcanzar los objetivos de sostenibilidad. Edificios diseñados con criterios de eficiencia energética, como el uso de paneles solares, plantas de tratamiento de aguas grises (PTAG), sistemas para el control de la iluminación y materiales reciclados, no solo reducen el consumo de recursos, sino que también disminuyen las emisiones de carbono. La adopción de estándares internacionales como LEED (Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental) certifica estos esfuerzos, incentivando a las empresas constructoras a adoptar prácticas más responsables y conscientes.
Otro aspecto crucial es la inclusión social en el diseño urbano. Las ciudades sostenibles deben ofrecer viviendas asequibles y accesibles para todos los estratos de la sociedad. Esto implica la planificación de proyectos que integren espacios públicos, áreas verdes y servicios esenciales, creando entornos donde la convivencia y la equidad sean protagonistas. La densificación urbana, cuando se realiza de manera planificada, puede optimizar el uso del suelo y reducir la necesidad de expansión descontrolada, preservando áreas naturales y agrícolas circundantes.
La resiliencia urbana también es un componente esencial. Las ciudades deben estar preparadas para enfrentar desastres naturales y cambios climáticos, lo que requiere infraestructuras robustas y flexibles. La construcción de edificios y espacios públicos que puedan soportar inundaciones, terremotos y otros eventos adversos es una inversión en la seguridad y bienestar a largo plazo. Además, la participación comunitaria en la planificación y gestión de estos proyectos fortalece la cohesión social y empodera a los ciudadanos para contribuir activamente en la sostenibilidad de su entorno.
Finalmente, la colaboración multisectorial es indispensable. Gobiernos, empresas constructoras, organizaciones no gubernamentales y la sociedad civil deben trabajar juntos para desarrollar políticas y prácticas que promuevan la sostenibilidad urbana. La educación y concienciación sobre los beneficios de las construcciones sostenibles son fundamentales para generar un cambio cultural que respalde estas iniciativas.
La construcción inmobiliaria sostenible no es solo una tendencia, sino una necesidad imperante para transformar nuestras ciudades en espacios inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles. Al adoptar prácticas innovadoras y responsables, podemos forjar un futuro donde el crecimiento urbano y el bienestar ambiental coexistan armoniosamente, cumpliendo así con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y asegurando una mejor calidad de vida para las generaciones presentes y futuras.
Accede a más información responsable en nuestra biblioteca digital en publicaciones Corresponsables.