¿Qué valoración hace de la situación ambiental a nivel internacional?
Estamos en un momento particularmente importante del proceso de negociación hacia un nuevo acuerdo climático, en tanto que, se ha logrado ya, por un lado, recibir un conjunto importante de lo que se llama contribuciones nacionales determinadas, que son las metas que los 196 países del mundo estamos comprometidos a presentar antes de octubre. Y ya el día 30 de junio se ha recibido en la Secretaría de las Naciones Unidas de la Convención del Cambio Climático el equivalente al 60% de emisiones de gases de efecto invernadero a nivel mundial. Son un poco más de 40 países de los 196, pero el porcentaje es ya del 60%. Esto forma parte de un proceso que permite identificar cual es la brecha que, a nivel global, se necesita cubrir a efectos de alcanzar el índice medio deseable, que es aquel en donde la temperatura global no se incrementa más allá de 1,5 o 2 grados centígrados. Entonces la brecha se va a poder determinar con mayor claridad en octubre; porque la Secretaría de la Convención del Cambio Climático debe presentar una sistematización y un balance de los compromisos nacionales.
¿Cómo ha influido la COP20 celebrada en Lima en el panorama internacional? La conferencia de cambio climático de Lima en diciembre de 2014 constituyó un avance en tanto que se acordó el borrador del acuerdo. Se acordaron los criterios y mecanismos más específicos vinculados a las contribuciones nacionales.
Se consolidaron un poco más de 10 mil millones de dólares para el Fondo Verde y se obtuvieron compromisos vinculados al tema del Principio de Responsabilidades Comunes pero Diferenciadas, considerando las respectivas capacidades de tal manera que, sobre esa base, entre otras iniciativas que se acordaron, se han dado los pasos necesarios para que ese año se continuara en dos niveles. El primero, los compromisos que a nivel global debemos desarrollar antes del 2020, fecha en que entrará en vigencia el nuevo acuerdo global. Y el segundo aspecto tiene que ver con las metas post 2020 y que, evidentemente, tendrán unos contenidos del acuerdo global.
¿Qué balance hace pues del proceso actual de acuerdo de cara a la COP21 de París? El balance es que hay que cuidar el proceso, invocar, esperar a que la mayor parte de países presente sus contribuciones nacionales. Cuidar el proceso de negociación global en tanto que, no esperar que las definiciones y el nuevo acuerdo se den durante la COP, sino más bien durante este proceso de negociación. Le quedan dos rondas de negociación formal. El 24 de julio, la copresidencia del Mecanismo de Negociación del Nuevo Acuerdo debe presentar un nuevo texto, un poco más reducido y con mayores elementos, que le den un contenido de carácter vinculante, legalmente hablando. Entonces, subrayo, lo importante debe ser asegurar y resolver la mayor cantidad de puntos relevantes antes de la COP de París de tal manera que allí se puedan dar las pinceladas finales.
Varios países han presentado formalmente ya sus contribuciones nacionales, así como también, en el caso de Perú, que hemos presentado la propuesta para consulta pública.
Estamos incluyendo además de contribuciones para reducir emisiones, también metas en relación a inversiones y acciones de adaptación frente al cambio climático. En el caso peruano, la propuesta presentada es de una reducción del 31% de gases de efecto invernadero en el 2030; y se está continuando con los análisis y, eventualmente, será aún más ambicioso, incrementando medidas no solamente vinculadas a responsabilidades gubernamentales, sino también buscando que haya una mayor intervención del sector privado de tal manera que, se pueda aprovechar esta oportunidad donde se trata igualmente de agregar valor al crecimiento a partir de medidas de mitigación de gases de efecto invernadero sin que implique una reducción de las tasas de crecimiento. Este es el enfoque en base al cual se ha establecido esa cuota de contribución nacional peruana.
¿Cómo ve la evolución y el compromiso de las empresas peruanas y del gobierno en materia de Responsabilidad Social?
Es muy importante el proceso que se ha llevado en los últimos años en donde las empresas, sobre todo en aquellos sectores donde Perú tiene oportunidades de reducir los gases de efecto invernadero, de identificar opciones de inversión. En materia de Responsabilidad Social, las empresas han sido muy activas en el proceso de normalización de las nuevas técnicas peruanas pero también de desarrollo de procesos de RS en sectores donde constituye no solamente una expresión de política, sino una condición de operación, la cual asegura una armonía con el entorno, un desarrollo de las inversiones.
Y junto con ello, aparecen redinamizados con este proceso de contribuciones nacionales de reducción de gases de efecto invernadero, agregando opciones de concretar nuevas oportunidades de inversión, modificando ciertos aspectos de los modelos de negocio y poniendo en práctica elementos que están hoy día presentes en la propuesta de Programa País presentado por Perú ante la OCDE, dado que Perú aspira a ser miembro de la OCDE y hay un compromiso vinculado con lo que es una Declaración de Economía Verde, de crecimiento verde. Y allí aparecen elementos que solamente podrán ser concretados si hay un proceso de involucramiento activo del sector empresarial.