Es urgente fortalecer mucho más, las acciones que actualmente realizamos, el aumento de las capacidades y habilidades del ser humano para enfrentar exitosamente el peligro de la amenaza mundial del cambio climático. En lo evitable o inevitable, el fortalecimiento de las capacidades humanas es prioritario para aplicar eficazmente las medidas de control ambiental. Sin ellas, todo plan de acción, nacional, internacional y mundial, no sería efectivo.
Por eso, las preguntas ¿si no hay cambio climático? o ¿si hay cambio climático? ¿Cómo será de la supervivencia del hombre en la biósfera? Es indudable, la persistencia de una incógnita a resolver por el hombre en busca de soluciones. En ese sentido, la propuesta debe ser la necesidad de fortalecer nuestras capacidades para centrar nuestros esfuerzos en combatir, el exceso de industrialización por un modelo menos contaminante; como también, combatir la pobreza de las naciones, a través de cambios fundamentales en las relaciones económicas norte – sur.
De esa manera, los planes de manejo ambiental, que puedan emprenderse a nivel de proyectos de inversión, especialmente, en proyectos de explotación de recursos naturales lleguen a situaciones ventajosas con el entono intervenido, donde las poblaciones, puedan asumir un rol preponderante en el cuidado de su medio ambiente.
En la actualidad, muchos proyectos de esta naturaleza, son viables, siempre que cuenten con un Plan de Manejo Ambiental, equilibrado con una racional rentabilidad socioeconómica financiera de la inversión. Pero, esta situación se presenta confrontacional; difícil de equilibrar por las más buenas razones de conservación ambiental. El concepto, “ gana gana”, no es una práctica en las relaciones empresa – sociedad. Los beneficios no son equitativos. En el Perú, muchos proyectos caminarían sin dificultad si las poblaciones llegan a alcanzar los beneficios esperados y la restauración de los ecosistemas intervenidos.
Entonces, para enfrentar el cambio climático, medidas estructurales y biológicas deben ser asumidas mundialmente; como es entre otras acciones el uso de fuentes nuevas y renovables de energía, electrificación rural, tratamiento de desechos urbanos, pago por servicios ambientales, re utilización de aguas residuales, porque todas ellas están ligadas en mayor o menor grado en contrarrestar el cambio climático. No sólo, enfocar el problema del cambio climático como resultado del desarrollo, sino de cambiar una estrategia de desarrollo mal concebida y ahondar políticas nacionales para cumplir con la Meta 7 del Milenio, el logro del desarrollo sostenible.